Especialistas en infraestructura pública y financiamiento para el desarrollo coinciden en que la sinergia entre la voluntad política, el acompañamiento y compromiso de bancas multilaterales generan un momento ideal para la concreción de proyectos.
Los miembros del panel de “Integración Regional: Claves para el Desarrollo Sostenible” recordaron que todo proyecto de grandes infraestructuras es complejo, pero representa el camino hacia las oportunidades de mayor conectividad, fortalecimiento del comercio, incorporación de actividades económicas y una serie de beneficios que acercan a todos los países al anhelado desarrollo socioeconómico y ambiental.
Jessica López Saffie, ministra de Obras Públicas de Chile, señaló que el desafío es la calidad y el estándar de las obras, y que todo trabajo de integración debe incluir aspectos sanitarios, de gestión de aduanas y de seguridad, entre otros vinculados a las necesidades y experiencias del usuario.
El titular del Ministerio de Industria y Comercio del Paraguay, Javier Giménez, coincidió en que se debe desburocratizar muchos aspectos del Estado para ofrecer servicios más eficientes que agreguen valor a los programas de infraestructura de integración.
Con relación al financiamiento, los profesionales concordaron en que el sector público no tiene la capacidad de generar todos los recursos necesarios, por lo que se debe buscar proyectos que atraigan el apetito de inversores privados.
Lecciones aprendidas
Entre las lecciones aprendidas, señalaron la necesidad de integrar los criterios de sostenibilidad y adaptación al cambio climático a los proyectos, y la de crear una red de cooperación y coordinación en la que se dé una comunicación fluida entre pares.
Desde la experiencia brasileña, João Villaverde, secretario de Articulación Institucional del Ministerio de Planificación del Brasil, indicó que la creación de una comisión dedicada a la integración de infraestructura es una iniciativa exitosa, ya que, cuando se necesita gestionar algo, se cuenta con todos los ministros en una sala, quienes, desde sus distintas experiencias y expertise, contribuyen a la búsqueda de soluciones eficientes.
Asimismo, involucrar al sector privado en la financiación y construcción de infraestructura ha sido vital, ya que permitió obtener recursos adicionales y compartir riesgos.