Las lesiones causadas en el tránsito son una de las principales causas de muerte y discapacidad en todo el mundo, por lo que cada año se recuerda la importancia de concientizar sobre la educación vial, la construcción y mantenimiento de infraestructuras y la respuesta eficiente a las necesidades de la gente.
Los países que conforman la Región de las Américas están realizando esfuerzos para alcanzar las metas del Plan Mundial 2021-2030. Específicamente, la meta 3 que promueve la utilización de guías y estándares que permitan evaluar y auditar la calidad de las vías. Entre ellos, destacan los sistemas de calificación por estrellas, como el Programa Internacional de Evaluación de Carreteras o las directrices mundiales de diseño de calles. Por otra parte, la meta 4 promueve el desarrollo de infraestructura que contemple la seguridad de todas las personas usuarias del sistema vial.
En su último informe sobre seguridad vial, la Organización Mundial de la Salud recordó que el desarrollo de infraestructura nueva que contemple la seguridad de todos los usuarios y que promueva la elección de medios de transporte sostenibles, el mantenimiento de la infraestructura existente y su adecuación a las múltiples necesidades de las personas son fundamentales para lograr el objetivo de reducir las muertes y lesiones debidas al tránsito por lo menos en un 50% para el 2030.
Datos de las Américas
Las lesiones causadas por el tránsito se cobraron la vida de 145.090 personas en la región de las Américas durante 2021, lo que representa el 12 % de las muertes estimadas a nivel mundial.
Las víctimas más afectadas son los usuarios vulnerables de la vía pública, como peatones, ciclistas y motociclistas, quienes están expuestos a mayores riesgos en las carreteras.
Se ha observado un aumento significativo en las muertes de motociclistas, que pasaron de representar el 12 % del total de muertes en 2009 al 27 % en 2021, lo que pone de manifiesto un problema creciente que requiere atención urgente.
Paraguay
El Plan Nacional de Seguridad Vial 2030 contempla objetivos claros como: la reducción de muertes y heridos en siniestros viales en un 30%; reducir la tasa de fallecidos jóvenes, especialmente entre 15 y 29 años, y consolidar un plan de financiamiento para la seguridad vial, entre otros.
La estrategia se distribuye en cinco grandes pilares: Gestión de la seguridad vial, vías de tránsito y movilidad más seguras, vehículos más seguros, usuarios de vías de tránsito más seguros y respuesta tras los siniestros viales.