El Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) e Itaipú Binacional firmaron un convenio para implementar el denominado “Plan 1000”, una iniciativa de pavimentación urbana que cubrirá 1.000 kilómetros en los 17 departamentos del país con una inversión de USD 100 millones.
El proyecto, presentado en el Palacio de Gobierno, busca mejorar la infraestructura vial en zonas urbanas y periurbanas, particularmente en distritos considerados vulnerables. Se estima que generará aproximadamente 10.000 puestos de trabajo directos e indirectos durante su implementación.
Según lo anunciado, la pavimentación se realizará utilizando diversas técnicas: un tercio mediante métodos tradicionales como empedrados y adoquinados, y dos tercios con pavimentación rígida, incluyendo asfalto y concreto. Esta combinación de técnicas busca optimizar recursos y adaptarse a las necesidades específicas de cada zona.
“Estos 1000 kilómetros representan mucho más que simplemente los USD 100 millones invertidos. Esta es una medida focalizada y direccionada a aquellos distritos más vulnerables, donde el desarrollo de infraestructura básica es urgente”, señaló el presidente Santiago Peña durante la presentación.
El plan contempla la contratación de empresas y mano de obra local, con el objetivo de fortalecer a pequeñas y medianas empresas del sector construcción. Para su implementación, se ha dividido el país en siete regiones operativas, tras un proceso de consulta con gobernadores e intendentes de los 270 municipios que serán beneficiados.
“Nuestro programa de 1000 kilómetros va a reincorporar, después de muchísimos años, la técnica del empedrado y del adoquinado, complementándola con el uso de hormigón para pavimentar nuestros barrios”, explicó la ministra de Obras Públicas, Claudia Centurión.
El financiamiento del proyecto proviene de recursos de Itaipú Binacional, disponibles tras la reciente renegociación del Anexo C del Tratado. Según informaron las autoridades, varios frentes de trabajo comenzarán a operar de forma inmediata.
La iniciativa tiene como principales beneficios la mejora de la conectividad vial en tramos vecinales estratégicos, mayor accesibilidad en áreas urbanas y periurbanas, y un impulso económico en las comunidades locales a través de la generación de empleo y activación del comercio relacionado con la construcción.