El presidente de la Cámara Vial Paraguaya (Cavialpa) destacó con firmeza el papel determinante que tiene la infraestructura en el desarrollo del país, recordando que pocos sectores inciden de forma tan directa y profunda en la vida de las personas.
En el marco del 5to Foro y Exposición Cavialpa, el Ing. Paul Sarubbi, presidente del gremio, recordó que detrás de cada ruta asfaltada, de cada puente que une comunidades, de cada hospital que se construye o escuela que se restaura, hay mucho más que materiales de construcción. Hay oportunidades, empleo digno, integración y calidad de vida.
El dirigente sostuvo que Paraguay enfrenta hoy un desafío histórico: duplicar su Producto Interno Bruto en los próximos diez años, lo que significa también duplicar el empleo, los ingresos y las oportunidades para todos los habitantes del país. En ese proceso, la infraestructura cumple un rol central como motor del crecimiento económico y social.
“Nuestro sector emplea actualmente a más de 240.000 personas de manera directa y a muchas más a través de una extensa cadena de valor que llega hasta el más pequeño proveedor de insumos y servicios. No solo queremos mantener en funcionamiento esa cadena, sino ampliarla exponencialmente en los próximos años”, afirmó.
Asimismo, señaló que esa expansión ya inspira a miles de jóvenes a capacitarse en oficios, técnicas y carreras vinculadas a la ingeniería, la arquitectura y la gestión de proyectos. “Cada obra nueva moviliza a jóvenes, instituciones educativas y centros de formación técnica; transforma comunidades y da sentido a una generación que busca una mejor calidad de vida. La infraestructura no solo construye caminos: construye futuro”, remarcó.
“Movilizamos a importadores, proveedores de maquinarias de alta tecnología, servicios logísticos y empresas familiares que crecen junto con cada obra. Ese movimiento productivo se traduce en más recaudación para el Estado, que puede así fortalecer su atención en educación, salud y seguridad. Cada proyecto deja huella en la vida nacional”, agregó, enfatizando el compromiso de los empresarios del rubro en seguir creciendo y dejando un legado a las próximas generaciones.
Articulación entre los diferentes actores
Para alcanzar el propósito de crecimiento se necesita una decisión firme y sostenida de invertir en infraestructura, de forma previsible y planificada. “Esa tarea no puede recaer solo en el Estado. Requiere la articulación de tres grandes actores: el sector público, el sector privado y las instituciones multilaterales de financiamiento”, sostuvo.
El Ing. Sarubbi reconoció los desafíos del contexto actual, especialmente las limitaciones que imponen las reglas fiscales para preservar el equilibrio macroeconómico y advirtió que esas restricciones no deben paralizar la acción ni frenar el desarrollo.
“Sabemos que los límites existen, pero también sabemos que deben impulsarnos a innovar. El desafío es encontrar mecanismos sostenibles, transparentes y eficientes que multipliquen la inversión pública mediante la participación privada, los fondos de infraestructura y, sobre todo, una planificación de largo plazo que trascienda los periodos de gobierno”, indicó.
En ese sentido, instó a fortalecer los espacios de diálogo entre el Estado y los gremios, de modo a construir políticas públicas de infraestructura sostenibles y de consenso. “Pedimos formar parte de las mesas de trabajo donde se diseñan y ejecutan las políticas públicas, porque tenemos el conocimiento técnico y la experiencia para contribuir al desarrollo. Apoyamos, además, los esfuerzos del Gobierno por mejorar la calidad del gasto público, lo que permitirá liberar más recursos para la inversión productiva”, expresó.
El titular de Cavialpa insistió en que invertir en infraestructura no es un gasto, sino una decisión estratégica que siembra progreso, genera empleo y fortalece la cohesión social. Cada dólar invertido en el sector, afirmó, tiene un efecto multiplicador que impulsa la competitividad del país y mejora la calidad de vida de los ciudadanos. “Desde Cavialpa reafirmamos nuestro compromiso con el desarrollo nacional. Creemos en la cooperación público-privada, en la transparencia, la eficiencia y la calidad de las obras. Queremos ser socios del Estado en la construcción de un Paraguay más conectado, más justo y más próspero”, subrayó.
Finalmente, hizo un llamado al consenso y al trabajo conjunto entre todos los sectores. “Este foro es una oportunidad para alinear decisiones y definir una hoja de ruta común. Si trabajamos juntos (Estado, sector privado y ciudadanía) con visión, patriotismo y compromiso, no hay límites para lo que Paraguay puede alcanzar. El futuro del país depende de nosotros, y tenemos la obligación de construirlo entre todos”, concluyó.





